viernes, 30 de noviembre de 2007

Una comunidad unida para conmemorar un aniversario más…




Para realizar una gran celebración se necesita el apoyo de una gran comunidad. Cuando la ayuda que se brinda cuenta con elementos como: esfuerzo, cariño y entusiasmo se obtiene un festejo inolvidable; este fue el caso de todas las personas que hicieron posible el XVIII aniversario de los mártires de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, UCA.

Una de las actividades que posee mucha relevancia en el marco del aniversario es la vigilia, la cual fue celebrada el sábado 10 de noviembre del presente año, en las instalaciones de la UCA. Durante el día se encuentran muchas actividades, es por ello que la universidad es visitada por cientos de personas que se incorporan a la comunidad universitaria para recordar a los padres jesuitas que fueron víctimas de la represión vivida en nuestro país en la década de los años 80’s.

Las personas que se unen a la celebración sólo tienen algo en común, conocen o tienen el deseo de conocer la historia de los mártires; ya que, se cuenta con la presencia de niños, jóvenes, adultos y ancianos; ellos visitan la universidad de diversas comunidades del interior del país como: cantones, ciudades y departamentos. De igual manera se suman visitares extranjeros, algunos de ellos sólo viajan para ser participes de la celebración.


Los lugares que más visitados son: Salón de los Afiches, Sala de los Mártires, Jardín de Rosas y la capilla universitaria, todo ello en un solo recorrido. El Centro Monseñor Romero proporciona un guía para que brinde las explicaciones pertinentes de cada lugar. Uno de los atractivos principales del día es la elaboración y exposición de alfombras, las cuales son construidas por organismos internos y externos de la universidad, este año se contó con la participación de YSUCA, Pastoral Universitaria, Fe y Alegría, BRESS, Sociología de la UES, entre otros.

Las alfombras son construidas desde la calle que comprende el edificio de arquitectura hasta la capilla. Ellas son parte fundamental en la procesión de los farolitos. En dicha procesión se concentra una gran cantidad de personas, es el preámbulo de la vigilia. La universidad se ilumina con las luces de los farolitos y el silencio se rompe con los cánticos que entonan los participes del recorrido. Otro elemento que se le suma a la procesión son las palmas confeccionadas por algunos departamentos de la universidad, todo esto genera un ambiente de introspección personal.

Al término de la procesión se celebra la misa por los mártires, para luego después dar inicio a la vigilia y acto cultural. Quién vive todos estos acontecimientos puede dar constancia del entusiasmo de los visitantes, el cual no puede ser derrumbado por la extrema calidez del clima al que se exponen las personas; ya que, la vigilia es realizada en un estacionamiento de la universidad.

El tiempo es el único que puede dar constancia de la grandeza de las personas; ya que, sólo los farsantes caen en el olvido. Todo el legado de los mártires sigue en pié, y ellos están presentes de una manera extraordinaria en el pueblo salvadoreño. Los padres jesuitas, Elba y Celina están vivos.

1 comentarios:

P dijo...

Gracias por tu correo :) Ya te agregué a mi lista. ¡Felices Vacaciones!